El musculo piramidal de la pelvis o piriforme es un músculo, de forma triangular, que se encuentra en la parte profunda de la región glútea. Una contractura muscular es una lesión ocasionada por la contracción involuntaria del músculo. Pese a que puede darse en todo el cuerpo es más común en la espalda, el cuello y las piernas. La contractura del músculo piramidal de la pelvis puede ocasionar el síndrome del piramidal.
El síndrome del piramidal es una condición en la cual el músculo piramidal sufre una contractura o espasmo, e irrita al nervio ciático que pasa por debajo. Este síndrome puede conllevar dolor y parestesias en la región lumbar, ingles, periné, nalga, cadera, parte posterior del muslo, pierna y pie. La compresión de las ramas del nervio ciático a menudo provoca dolor y parestesias en la parte posterior de la cadera.
El dolor puede ser crónico y empeora cuando se presiona firmemente el piramidal contra el nervio ciático como la sedestación prolongada y, además, los pacientes presentan dificultad para andar o al cruzar la pierna homolateral por encima de la otra.
El acortamiento o la contractura del músculo piramidal pueden ser debidos a muchas causas:
- Sobrecarga: mala planificación del entrenamiento, escasos estiramientos.
- Insuficiencias biomecánicas: como defectos mecánicos del pie, alteraciones en la marcha o malos hábitos de la postura (mantenernos sentados durante un largo periodo de tiempo).
- Traumatismos: caídas sobre el glúteo.
La fisioterapia está recomendada en 2 o 3 sesiones a la semana, además se le recomendarán una serie de ejercicios terapeúticos.
La meta de la fisioterapia es la eliminación de síntomas con un programa sistemático que aumenta el rango de movimiento y la fuerza de los grupos musculares y las articulaciones de la parte afectada, el piramidal.
El piramidal como es el principal rotador externo de cadera junto con los otros rotadores cortos y se estira con addución (aproximación) de la cadera desde una posición de flexión de 90º. Se ha comprobado que la eficacia del estiramiento del piramidal aumenta con la aplicación de spray refrigerante o hielo.
Dentro del masaje puede considerarse el tratamiento del punto gatillo, resultando más efectiva si el músculo es alargado pasivamente. Se ha descrito una técnica de masaje interno, que resulta muy efectiva en el síndrome del piramidal, que se realiza movimientos laterales del dedo a lo largo de la porción del vientre muscular. La osteopatía también ayuda con la manipulación del Sacro que se encuentra en disfunción por la inserción del Piramidal a este.